Cada uno de ustedes ha estado en un momento único y particular en mi vida, siempre han sido momentos claves y especiales que han determinado decisiones importantes en mi rumbo por mi vida.

Ian, llegaste un 2011 y fuiste mi primer hijo, único por 8 años. Contigo comencé y aprendí este papel de ser mamá, contigo he ido de arriba para abajo y has estado conmigo incondicionalmente en todo momento. Tu y yo viajamos mas de lo que hemos viajado con tus hermanos y disfrutamos mucho cada etapa que has tenido. Mi atención fue completamente tuya por ocho años y ha sido hermoso. Aprendí contigo sobre lo que quería hacer de mi vida, que tipo de ejemplo sería para ti y que me vieras con orgullo para que algún día todo eso que luchamos juntos, sea un ejemplo para que luchemos juntos lo que tu quieras realizar en tu vida, nada es imposible. Por ti comencé mi carrera como psicóloga.
Nahil, tu llegaste super de sorpresa como un pequeño torbellino, me habían dicho que ya no podría tener hijos por mi operación en la tiroides, que tendría que estar en largos tratamientos y cuando me entere que estaba embarazada de ti, a pesar del miedo y la incertidumbre, me emocione muchísimo. Fuimos muy activos durante el embarazo, disfrute tus pataditas y mi pancita crecer. Cuando te conocí por primera vez llegaste con los ojos abiertos y observando todo. Después te quiso acomodar la enfermera, te resbalaste poquito y te pegaste en tu cabecita en tu cunero y desde ahi te volviste loquito. Me has acompañado en mis trabajos, dando clases de baile y talleres. Te he disfrutado muchísimo, sentarme a jugar contigo por horas en tu mundo y me dejes enseñarte ha sido lo mas bello que he experimentado como mamá. Vivir a través de tus ojos en esta etapa de mis treintas la vida entera ha sido maravilloso. Sabores, olores, colores, dinosaurios, aviones, trampolines, medicinas, comida, playa, albercas, etc. He estado mas presente. Contigo aprendí sobre mis limites y amor propio. Es un viaje que aun no termina pero es un viaje que comenzó a partir de tu presencia en mi vida.
Galia, mi pilón, no pensé que por fin fuera a tener a mi niña, decir que no quería vestirla de rosa por que me caía gordo ese color, ahora me encanta y te visto de rosa la mayoría del tiempo. Hasta yo me visto de rosa. Wow, contigo ha sido toda una aventura, un embarazo muy mareado, muy vomitado, muy lleno de pastillas, un poco solitario. Tu nacimiento fue también su propia aventura pero gracias al universo estas bien, estamos bien. Tenerte en mi vida estos pequeños cuatro meses, ha sido un cambio de 360 grados. La dinámica familiar se ha ido poco a poco acomodando, tus hermanos me ayudan mucho contigo, tendrás para sobrevivir la escuela de tres personas de las que aprenderás todo lo necesario para llevar tu vida. Me he cuestionado muchas cosas, tener niños y tratar de estar en su punto de vista, criarlos de un modo es una cosa, pero tener una niña, verla pequeña, querer que nada la lastime, me hace regresar a mi niña interior y darme cuenta cuan abandonada estaba. Si bien ya había comenzado el viaje al amor propio llegaste a enseñarme el amor hacia mis acciones, hacia la vida y hacia los demás. El impacto que tenemos en la vida de otras personas que a veces actúan desde su trinchera y sus heridas, ver mas allá de eso y revisar que pasa con uno mismo, ha sido toda una experiencia que realmente ha cambiado mi vida y sigo aprendiendo. Además del amor de pareja, me he cuestionado, como quisiera que encontraras a alguien, que te hiciera sentir como, que te sintieras cuidada y protegida, aunque se que tu podrás hacerlo sola, pero es bonito tener a alguien que te de la seguridad de que te acepta como eres y tu a esa persona y que ambos se dan esa seguridad, ese cuidado y por sobre todo ese respeto. De nuevo me hace voltear a revisar mis experiencias y mis aportes.

Cada uno de ustedes ha llegado a realizarme como persona en sus distintas fases. Siempre agradeceré que los me escogieron y que estamos juntos para tener mas aventuras en nuestros día a día. Los amo. Su mami.